UNOS SEGUNDOS DORADOS
¿Cuántas personas pueden estar viendo una de las cadenas de televisión más importantes de España en horario Prime Time? Imagina que en ese momento uno de tus productos aparece en pantalla, y lo que dicen sobre él es “Con esta piña nunca fallas”… Al mismo tiempo, una imagen de decenas de piñas con una etiqueta que las identifica como Solen, en la que se puede ver un logo bastante colorido sobre negro, y una chica de la que salen estrellas de la mano. Decenas de esas etiquetas vistas en primer plano. Y repito el comentario: “Con esta piña nunca fallas”.
A partir de ahí… creo que es fácil juzgar la importancia de la identidad visual y el packaging para cualquier producto que se comercialice. ¿Cómo de importante consideras que los espectadores identifiquen inmediatamente tu etiqueta para poder comprar piña Solen Gold la próxima vez que vayan al supermercado?
Si a mí me dijeran que un producto es garantía de calidad, querría comprarlo.Esa aparición en la 1 de RTVE puede suponer miles de ventas más de ese producto, pero para ello la marca (en este caso uno de sus elementos visuales) ha de ser identificable.
Si a mí me dijeran que un producto es garantía de calidad, querría comprarlo.Esa aparición en la 1 de RTVE puede suponer miles de ventas más de ese producto, pero para ello la marca (en este caso uno de sus elementos visuales) ha de ser identificable.

Solen Gold, marca creada por Reformarketing, cumple con estas premisas, y sabemos que gracias a ello nuestro cliente puede haber generado más beneficios después de esta aparición en un medio tan importante. Ahí radica el poder de la identidad visual, entre otros aspectos.
Éste es un buen ejemplo para aclarar lo que es y lo que no es la identidad visual. Como su nombre indica, se trata de un conjunto de elementos que, sistemáticamente y según unas normas definidas, expresan y representan visualmente los valores y la personalidad de una marca.
¿Sabías que un cliente insatisfecho lo dirá de media a nueve personas? Eso sin contar con redes sociales...

¿Sabías que un cliente insatisfecho lo dirá de media a nueve personas? Eso sin contar con redes sociales...
Subrayo la palabra “conjunto”. La identidad visual NO ES un logo, ni un Flyer, ni unas tarjetas, ni una foto. Es la suma de todos ellos. Para ser más correctos, es el sistema que representa visualmente esa marca. Un sistema compuesto, entre otros, de los siguientes elementos:
- Logotipo y variaciones.
- Tipografías.
- Imágenes.
- Retícula o plantilla.
Y este sistema será el que, poco a poco, y en función de los canales y el modo en el que aparezca, irá grabándose en el subconsciente de los consumidores, que lo asociarán con la experiencia de consumo que hayan tenido. Por eso es igual de importante que detrás de una gran marca haya una gran empresa (y no me refiero al tamaño).
Espero haber aclarado algo sobre lo que es la identidad visual de una marca, y sobre el proceso por el que poco a poco va siendo reconocible e identificable por nuestros consumidores.
Y ahora, si crees que tu identidad no es la adecuada, pasa a la acción y ponle solución. Y si crees que ya lo es, compruébalo con indicadores para asegurarte. Los datos no mienten. Otro día hablaremos sobre cómo medir la efectividad de una marca.
Juan Antonio Carcelén
CEO
Arquitecto, consultor de negocios, y experto en diseño e identidad corporativa. Fundador y director de Behind.